El PUEC participó en la mesa redonda organizada por el CEIICH, el CRIM y el IIS, donde académicos de la UNAM reflexionaron desde diferentes miradas sobre los recientes sismos.

El Dr. Javier Delgado, director del Programa Universitario de Estudios de la Ciudad (PUEC) de la UNAM, participó en la mesa redonda “Entre la tierra que se mueve y la sociedad que se cimbra” organizada por el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (CEIICH), el Centro Regional de Investigaciones Multidisciplinarias (CRIM) y el Instituto de Investigaciones Sociales (IIS), de la UNAM, un esfuerzo para conjuntar miradas diversas sobre los recientes sismos de septiembre en nuestro país.

Durante la mesa llevada a cabo el 23 de octubre dedicada a pensar los “Aspectos Sociales” de este fenómeno natural, el Dr. Delgado comentó que hay que darle sentido a la inmediatez y pasar a estructuras más perdurables. Además, lograr que no se diluyan los apoyos logrados con el uso de las nuevas tecnologías, pues las redes sociales rompieron con lo territorial. Pasamos del ámbito personal, mi barrio, mi ciudad, al país y tiene implicaciones para cómo estamos percibiendo el espacio. Asimismo, propuso la urgencia de crear un protocolo de emergencia y hacer propuestas a través del Comité Científico para la Reconstrucción.

En la mesa, moderada por el Dr. Hugo José Suárez, del IIS, la Dra. Marcela Meneses del mismo Instituto, señaló que “Ese día se mostró que aún hay esperanza, nos escuchamos, nos abrazamos, subimos al extraño al auto o nos prestamos el celular”. Afirmó que el reto es que no se diluya la participación social, que la gente se organice y empodere. También destacó que los ciudadanos tomaron las riendas ante la emergencia y mostró una ausencia del Estado y la apariencia de autosuficiencia de la sociedad civil. También invitó a prepararse para opinar de forma organizada sobre la actuación del gobierno y las constructoras.

La Dra. Margarita Favela, investigadora del CEIICH, indicó que, a diferencia del terremoto de 1985, cuando hubo una participación inédita de grupos vecinales, luego del sismo de 2017 los grupos están atomizados ante una especulación inmobiliaria avasalladora. “Hoy carecen de ese aglutinamiento y trabajo colectivo. No hay una voz que los unifique como damnificados y al gobierno le interesa volver a la rutina, porque la gente es más manejable”.

También se llevaron a cabo las mesas “Miradas humanísticas” y Aspectos geofísicos y estructurales” con la participación de académicos de distintas disciplinas.

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